Uno "desos"

Uno de esos políticos que tenemos por la España profunda al mando de gobiernos y presupuestos, acaba de admitir que usó el teléfono móvil que le paga el ayuntamiento de su pueblo, Vallelado en Segovia, para realizar llamadas eróticas, generando un facturón de 5700 leuros que ahora dice va a devolver.

El figura además es muy tonto y un completo ignorante, aunque trate de pasar por listo, porque su justificación ha sido: "me dieron un móvil nuevo y se debió quedar conectado a un número de esos".

Si es que mira que somos mal pensados. El pobre hombre fue acosado por un tío de Movistar para que cambiara su Nokia del año 2000 por un LG Táctil de última generación y unas tarifas que ahorraban 200 euros al mes al pueblo. El pobre hombre no sabía bloquearlo y se marcó el solito. Y por mala suerte no se marcó el teléfono de su suegra, ni el de su secretaria, ni el de su hija pequeña , sino el 803406646, uno de esos, que mira tú por donde es un teléfono erótico al que es fácil conectarse pero muy difícil desconectarse.

Y el tío que lo llevaba en la americana, cuando lo sacó del bosillo empezó a oir jadeos y "dime que más quieres, mi amol", pero no era capaz de apagarlo de ninguna de las maneras. Y tras 3 horas se dio cuenta, que quitando la tapa de atrás y quitando la batería, para lo cual usó la pluma de oro que le había regalado un amigo constructor y que por cierto se rompió en el envite por lo cual tendrá que pasar una factura al ayuntamiento, se apagaba el teléfono, y entonces ya sí se cortó esa llamada a la que se había quedado conectado en contra de su voluntad.

La culpa es de la tecnología moderna, esos cabritos de los japonees con las pantallas táctiles que te conectan facilmente por ejemplo a teléfonos eróticos, y luego no hay forma de desconectarse. O lo mismo ha sido un virus en el teléfono nuevo, que te conectaba con la línea caliente y deshabilitaba el botón de fin de la llamada.

Pero esto no es lo más sorprendente, sino que el tío jeta, dado que asumía que iba a tener que devolver la pasta del teléfono, estaba pasando gastos de kilometraje falsos para recuperar la pasta por ese otro lado. Así, a lo tonto, pasaba 50 km por ir a un pueblo que estaba a 10, y el cabrón del concejal de su partido que no le aceptaba estos gastos ha tenido que pasarse al grupo mixto.

Mira si es cabrón el concejal, que hacía la comprobación del kilometraje con Google Maps con la opción de "Más Rápido", cuando él, el honesto alcalde, como no tiene TOM TOM se perdía incrementando los km al destino, y luego empezó a usar el Google Maps , pero siempre con la opción de "Más barato" razón por la cual hay veces que hay que dar rodeos para evitar peajes y demás. Eso aclara todo, y por eso el partido le apoya y el que se ha tenido que mudar ha sido el capullo del concejal que no le quería dar 9000 euros en kilometraje.

Ya sabéis, cuidado con los teléfonos móviles nuevos, que a la menor os dejan conectados con un teléfono "desos"